Para quien no conozca a Lola Soler puedo decirle, que es una mujer joven, delgada, nerviosa, sincera, activa y treméndamente original. Posee ese don natural de la fuerza creadora que reparte a diestro y siniestro con tanta vehemencia que parece un volcán en plena erupción en cualesquiera de las actividades que emprende.
Pintó lienzos desde bien pronto. La conocieron en l´Hort del Xocolater de Elche donde sembró buenas amistades. Realizó múltiples exposiciones donde siempre llamaba la atención su forma de sentir la pintura.
Pero un día paró y decidió "crear" hijos e investigar en otros aspectos del mundo del arte y la imagen. También en todos estos campos ha tenido éxito.
Aunque su vida ha sido agitada, esta mujer, de arrolladora personalidad, es capaz de retomar de nuevo los pinceles y regalarnos unos trazos llenos de esa fuerza que la caracteriza.
Sensibilidad, trabajo, ganas,...
Estoy segura que desde este renacer al arte, nos vamos a encontrar con una artista que va a darnos muchas sorpresas y de la cual escucharemos grandes elogios.
De entrada, aquí está la admiración de una servidora.
Mª José Marín.
Lda. en BBAA y prof. de ARTES PLÁSTICAS.